Este habitante de los espacios abiertos y secos, pertenece al grupo de las alondras. Los colores pardo jaspeados las mimetizan con el terreno y al ser aves principalmente de hábitos terrestres, en ocasiones resulta difícil localizarlas, salvo cuando se encaraman a pequeños promontorios. Las crestas que lucen algunas de estas especies, entre ellas la Cogujada como queda bien evidente, algunos estudiosos lo atribuyen a un refinamiento en el camuflaje, llegando a postular que así se confunden más facilmente entre la vegetación corta y seca o entre los rastrojos del cereal por donde se desenvuelven.
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